lunes, 2 de mayo de 2011

21060: ¿es realmente el fin del neoliberalismo...?

EVO ANULARÁ OCHO LEYES
QUE SUSTENTAN AL
DECRETO SUPREMO 21060

Minería. Descartaron nacionalización de minas, pero habrá migración de contratos
La Razón – 1º de Mayo de 2011

Dentro del paquete de medidas que emitirá el Gobierno en ocasión del Día del Trabajador, el presidente Evo Morales anunciará la eliminación de ocho leyes que, en su proceso modificatorio, “sepultarán” el Decreto Supremo 21060. Además, revelará cambios en el sector productivo minero.
El discurso principal del Jefe de Estado se desarrollará en la población minera de Huanuni, Oruro, donde anulará las siguientes leyes: Ley de Minería, Ley Forestal, Ley General del Trabajo, Ley de Bancos, Ley de Inversiones, Ley de Electricidad, Ley de Exportaciones y Ley Ambiental.   
“Mediante un decreto (supremo) vamos a eliminar las leyes que quedan de 20 años de neoliberalismo, (entre ellas) la Ley de Minería, la Ley Forestal, la Ley Laboral que hay que adecuarla a la nueva Constitución, esto para sepultar al 21060”, afirmó Morales ayer en Cochabamba.
Acotó que aún quedan “residuos” del Decreto Supremo 21060, puesto en vigencia por el ex presidente Víctor Paz Estenssoro, con el objetivo, según Morales, de contrarrestar la inflación. “Pero mucho depende de las normas, seguramente el gabinete va a seguir trabajando para poder emitir algunos decretos supremos que puedan siempre ser una respuesta al pueblo boliviano, pero también un homenaje a los trabajadores el 1 de mayo”, destacó el Mandatario.
Al respecto, según expresó el ministro de Trabajo, Félix Rojas, la emisión del conjunto de medidas que lanzará Morales en la localidad minera marcará los plazos y condiciones para modificar las ocho normas que intentarán “sepultar” al 21060.
“La abrogación del Decreto Supremo 21060 se materializará a través de la emisión de un decreto que incluye una serie de leyes que tiene una tendencia a la defensa de los recursos naturales”, afirmó Rojas en entrevista con radio Panamericana.

Minería. Una fuente del Órgano Ejecutivo reveló a La Razón que Morales anunciará hoy el avance de la negociación entre el Gobierno y la empresa minera privada Sinchi Wayra, subsidiaria de la suiza Glencore, donde se estudiaba cambiar el contrato de arriendo a riesgo compartido y con participación estatal mayoritaria.
El ministro de Minería, José Pimentel, afirmó el 21 de abril que el Gobierno no rescindirá los contratos con Glencore, por pedido de los sindicatos de trabajadores de las minas. El Ejecutivo optó por una renegociación.
“Estamos discutiendo con la empresa procesos de migración de alquiler a riesgo compartido con una participación mayoritaria del Estado”, afirmó el funcionario.  
La suiza Glencore opera en Bolivia a través de su filial Sinchi Wayra en la mina Bolívar con contrato de riesgo compartido y en arrendamiento los yacimientos de Porco y Colquiri. En tanto que la minera canadiense Pan American Silver Corp. (PAAS) en contrato de riesgo compartido la mina San Vicente.
El 13 de abril, La Razón informó que el Presidente se comprometió a “recuperar” los yacimientos mineros en el marco del acuerdo establecido con los trabajadores de la minería estatal. Se preveía que este anuncio sea emitido por el Mandatario en el Día del Trabajador.
Empero, el Gobierno, luego del anuncio de Morales, descartó el proceso de nacionalización de minas.
Ese anuncio fue confirmado por la fuente que consultó este medio, quien dijo que se “descartó” la nacionalización del sector minero.
Incluso el ministro de Trabajo, Félix Rojas, confirmó a un medio de la ciudad de Santa Cruz que no habrá nacionalización de las compañías mineras. Añadió que habrá una migración de contratos para que el Estado tenga más control de los yacimientos productivos. El Gobierno nacionalizó hasta la fecha 12 empresas de capitales foráneos.


LA “DEROGACIÓN SIMBÓLICA” DEL D.S. 21060
Por Redacción Central | - Los Tiempos - 3/05/2011
Lo que hizo el 21060 fue dar aspecto legal a leyes naturales de la economía cuya vigencia está muy por encima de la voluntad de este Gobierno o de cualquier otro

Cuando el 28 de agosto de 1985 el Presidente Víctor Paz Estenssoro promulgó el Decreto Supremo 21060, alguien le preguntó si se trataba de una medida de alcance coyuntural o estructural. “Si por coyuntura se entiende un periodo de 20 años, es coyuntural”, respondió con la parquedad que lo caracterizaba.

Cuatro años después, en 1989, cuando se hizo cargo de la Presidencia de la República, Jaime Paz Zamora ratificó su intención de “relocalizar al 21060”, como había prometido en su campaña electoral. Promulgó el D.S. 22407 y aseguró que con esa disposición su compromiso quedaba cumplido.

El domingo pasado, cinco años después de haber asumido el Gobierno de nuestro país y a 26 años de la promulgación del D.S. 21060, el presidente Evo Morales promulgó el D.S. 871 que consiste, según explicaciones de autoridades gubernamentales, en una “derogación simbólica” del D.S. 21060.

Como era de prever, la medida gubernamental ha dado lugar a múltiples interrogantes. La primera de ellas, la más obvia, es la referida a las razones por qué el gobierno del MAS esperó más de cinco años para “sepultar” al que atribuyen la condición de pilar fundamental del “modelo neoliberal”. Si era tan fácil hacerlo… ¿por qué no lo hizo antes?, se preguntan con razón quienes de buena fe creyeron la mitología de la que fue recubierto el D.S. 21060 durante sus ya más de 26 años de vigencia.

Más suspicacias aún ha despertado el carácter “simbólico” que se le ha dado a la “sepultura” del tan mentado decreto. En efecto, los dos artículos del D.S. 871 resultan del todo inocuos si se los compara con la solidez de los 8 Títulos divididos en Capítulos y 170 artículos que contiene el D.S. 21060. Ni uno solo de esos artículos es explícitamente derogado por el D.S. 871, pero en su artículo uno "determina la eliminación completa de toda disposición o consideración legal fundamentada en el decreto supremo 21060".

Es comprensible que el Gobierno no haya encontrado mejor fórmula para dar apariencia de cumplimiento a su compromiso de derogar el D.S. 21060. No podía ser de otro modo pues lo que hace 26 años hizo la medida en cuestión no fue más que dar aspecto legal a leyes naturales de la economía cuya vigencia está muy por encima de la voluntad de este Gobierno o de cualquier otro. Si hace 26 años fue necesario hacer explícita la vigencia de esas leyes en el territorio nacional, como la de la oferta y demanda, por ejemplo, fue porque la insensatez colectiva que se apoderó de nuestro país en los años previos hizo necesario que se llegue a tal extremo.

Como se ha podido constatar una vez más, no es posible que este Gobierno o cualquier otro derogue los elementos centrales del 21060 como son, por ejemplo, el reconocimiento de las leyes del mercado para fijar los precios a través del libre juego de la oferta y la demanda o la libre contratación que rige las relaciones laborales de la inmensa mayoría de la población económicamente activa que desarrolla sus actividades en la informalidad. Mientras eso no se modifique, el 21060 podrá ser derogado “simbólicamente” muchas veces más pero, en la práctica, nada fundamental cambiará.



UN ANÁLISIS DE LAS VENTAJAS Y DESVENTAJAS DEL DECRETO SUPREMO Nº 21060, PUEDES ENCONTRARLO EN EL SIGUIENTE ENLACE:

Y PUEDES ACCEDER AL TEXTO COMPLETO DEL DECRETO SUPREMO EN:

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